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Vuelvo para cumplir la promesa que hice de postiar algo antes que el 2008 se esfume para jamás volver.
Han sido días terribles para mí, pasar de un estado de alegría y satisfacción a otro de infinita tristeza en menos de una semana es cosa seria. Una malegría, una saudade, una desintoxicación del espíritu que se somatiza en el plexo solar, como una patada en el vientre, es una sensación de vacío que se apodera de tu tripa y te hace sentir que el sufrimiento no tiene porque ser ajeno para ti.
He estado reflexionando acerca del asunto, el querer y el amar son cosas tan diferentes, aunque la mayoría crean que son similares, no lo son. En el querer se espera algo, una recompensa por cada acto realizado pos del otro. En el amar no. Todo se da de forma desinteresada. Enamora-miento, equivale a autoengaño, equivale a pensar que recibirás alguna recompensa, es mentirse a uno mismo acerca de lo que se siente y se espera. El amor, sentimiento sublime per excellance, lo entrega todo a cambio de nada, y sigue otorgando aún cuando no le reporten más sino desazón.
Todo se termina, todo lo que alguna vez se empieza tiene que terminar, y aunque las razones no se compartan o las circunstancias o las acciones por medio de las cuales se pone fin a una relación no sean las más loables, siempre todo tiene que terminar, el papel de víctima o victimario es relativo, tal vez no se lo busca concientemente, pero no se sufre por igual. El que se enamora pierde, me dicen. Estoy a punto de creerlo. Esta vez me tocó perder y la verdad han sido unas terribles fiestas de fin de aGno y mientras yo ando hecho un completo giñapo, sé a ciencia cierta, porque lo siento, que del otro lado no es así.
La conclusión que puedo sacar hasta el momento sobre esto es que hay que seguir creyendo en el amor, que es el amor la única solución para este mundo aciago e indiferente. Que hay que amar desinteresadamente sin esperar nada a cambio. Se que suena terrible porque siempre esperamos algo que nos proporcione felicidad y nos haga sentir esas hermosas mariposas en la boca del estómago. En cuestiones amorososas el proceso de desenamoramiento, de desintoxicación de todo aquello que te brindaba el otro y te hacia feliz, es sumamente necesario, porque en este mundo todo tiene su complemento, su contrario u opuesto que se requiere para lograr la Unidad.
Como bien lo dice Calamaro en Crimenes Perfectos: "La moneda cayó por el lado de la soledad y el dolor".
Hasta pronto, saludos de venturoso aGno nuevo a todos mis lectores.
Att.
Leo.
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Vuelvo para cumplir la promesa que hice de postiar algo antes que el 2008 se esfume para jamás volver.
Han sido días terribles para mí, pasar de un estado de alegría y satisfacción a otro de infinita tristeza en menos de una semana es cosa seria. Una malegría, una saudade, una desintoxicación del espíritu que se somatiza en el plexo solar, como una patada en el vientre, es una sensación de vacío que se apodera de tu tripa y te hace sentir que el sufrimiento no tiene porque ser ajeno para ti.
He estado reflexionando acerca del asunto, el querer y el amar son cosas tan diferentes, aunque la mayoría crean que son similares, no lo son. En el querer se espera algo, una recompensa por cada acto realizado pos del otro. En el amar no. Todo se da de forma desinteresada. Enamora-miento, equivale a autoengaño, equivale a pensar que recibirás alguna recompensa, es mentirse a uno mismo acerca de lo que se siente y se espera. El amor, sentimiento sublime per excellance, lo entrega todo a cambio de nada, y sigue otorgando aún cuando no le reporten más sino desazón.
Todo se termina, todo lo que alguna vez se empieza tiene que terminar, y aunque las razones no se compartan o las circunstancias o las acciones por medio de las cuales se pone fin a una relación no sean las más loables, siempre todo tiene que terminar, el papel de víctima o victimario es relativo, tal vez no se lo busca concientemente, pero no se sufre por igual. El que se enamora pierde, me dicen. Estoy a punto de creerlo. Esta vez me tocó perder y la verdad han sido unas terribles fiestas de fin de aGno y mientras yo ando hecho un completo giñapo, sé a ciencia cierta, porque lo siento, que del otro lado no es así.
La conclusión que puedo sacar hasta el momento sobre esto es que hay que seguir creyendo en el amor, que es el amor la única solución para este mundo aciago e indiferente. Que hay que amar desinteresadamente sin esperar nada a cambio. Se que suena terrible porque siempre esperamos algo que nos proporcione felicidad y nos haga sentir esas hermosas mariposas en la boca del estómago. En cuestiones amorososas el proceso de desenamoramiento, de desintoxicación de todo aquello que te brindaba el otro y te hacia feliz, es sumamente necesario, porque en este mundo todo tiene su complemento, su contrario u opuesto que se requiere para lograr la Unidad.
Como bien lo dice Calamaro en Crimenes Perfectos: "La moneda cayó por el lado de la soledad y el dolor".
Hasta pronto, saludos de venturoso aGno nuevo a todos mis lectores.
Att.
Leo.
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5 comentarios:
todo se termina o todo se transforma, también se puede decir, porque uno siempre sigue, así que se termina hasta por ahí nomás. Coincido en que el enamoramiento tiene bastante de mentirse a uno mismo, no sé si simplemente por mentirse o más bien por "querer creer".
en fin, qué sé yo, veo que estás medio bajoneado, espero que arranques con todo el aGno que ya se viene.
saludossss
m.
Ay Leo, que melancolia verte asi, pero que llegue el 31 de diciembre y ese sea el ultimo dia que piensas con tristeza en lo que pasó. Muy en el fondo se que los años nuevos son simplemente la continuidad de algo, no hay nada nuevo....todo es continuo, pero el mistisismo popular nos brinda la oportunidad perfecta, con el cambio de año, te tener la esperanza que todo será nuevo, bueno, y que todo lo malo quedará atrás. Asi que aprovecha eso, el 31 será el ultimo día en que piensas con tristeza en lo que paso, vas a ver que la tormenta es solo un augurio de mejores tiempos, y bueno, por mi parte yo te auguro mucho amor para el resto de tu vida.
llego tarede?
abrazo eo
el amor es nunca tener que ...
el amor es bravo, loco, my bravo, le ponemos todo y no nos da nada, ahí está el quiz, yo tampoco se mucho
buen año
Leo, bien dicen que el amor es como la guerra: facíl de iniciar pero muy dfiícil de terminar... pero cada guerra trae una reconstrucción, eso es seguro.
Abrazos,
LeRouge
oooo estoy de acuerdo... cuerdamente, si me lanzo al vacio de mi ser, es la soledad compañera y complice, si me quedo a la deriva de mis sensaciones, es la soledad brutal ensoñacion y prefiero morir en el intento de conformarme amante por dentro, para saber amar al proximo.
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